25 de octubre de 2008

PATA de perro

Aventurero en Nayarit. Ilustración: Colibrí de ónyx

Después de un buen rato sin vacaciones, estoy lista para atacar mi tiempo libre. A mis anchas, a mi aire. Mi lado vago me reclama.
Tanto que mis amigas me dicen que yo quiero estar de vacaciones siempre.
Y tienen razón, si pudiera, en una de esas tomo la palabra.

Lo que pasa es que los caminos llaman y me gusta hacer un alto y reflexionar acerca de las cosas y personajes que me encuentro.
Esos son los placeres del viajero. Las instantaneas que quedan en la mente. Los amigos de paso, los momentos difíciles, los peligrosos, la gente y las experiencias.

Qué buena onda los viejos Raidy Leyva y Napoleón, por ellos Cuba es más bella y Santiago entrañable. A Padre Pico tengo que volver...

El amigo "Normal" de Buenos Aires con sus tantos hijos, su carita morocha y su antro prometedor: Ladies, drinks and affairs.

La Señora que llamaba a desayunar pegando con el palo de la escoba en el techo de su casa, después de un día de tremendo cansancio en el Torres del Paine.

El perro aventurero de Nayarit con boleto de vista panorámica en la parte trasera de la troca.

El Ratoncito de San Cristobal y la Rata Reynalda que nos siguió desde la loma hasta la plaza cerca de la casa de Yolanda. Puro vino, pura fiesta hasta el amanecer...

Pues saben qué: Raidies, "Normales", Perros, Señoras, Ratoncitos y Reynaldas...
P'allá voy...prepárense para encontrarnos...